Las cubiertas protectoras se fabrican para salvaguardar un gran número de artículos que requieren protección contra las condiciones climáticas variables, es decir, el polvo, la lluvia, la nieve y el sol. Es posible producir cubiertas protectoras usando una máquina soldadora o una pistola de calor. Los vehículos y la maquinaria que se utilizan en las zonas agrícolas o las obras de construcción requieren una cobertura protectora cuando no están en uso. Por ejemplo, los barcos de motor y los veleros se protegen de los contaminantes indeseables como los excrementos de los pájaros, que de otro modo carcomerían las superficies y causarían daños. Los muebles para patio y las parrillas suelen ser demasiado pesados y rígidos para guardarlos en un garaje o un cobertizo, lo que hace que las cubiertas protectoras sean una alternativa conveniente. Por suerte, las cubiertas protectoras están disponibles en varios tamaños con el fin de proteger varios artículos.